Hace escasos días, el documental sobre poker "All In: The Poker Movie" saliò a la luz en el cual participan grandes estrellas de este deporte como el actor Matt Damon, Scott Nguyen, Phil Hellmuth y el controvertido Howard Lederer, fundador de Full Tilt. Pero una de las principales caras de este film, es el campeón mundial del 2003 quien como todos saben, convirtió $ 39 en dos millones y medio de dólares.
Acá, te reproducimos la entrevista concedida por el Team Pro, a nuestros compañeros de Pokerworks. También agradecemos a nuestros compañeros de Poker10, por el material.
PW: Cuando ganaste el Main Event, ¿qué le ocurrió a tu estilo de vida? ¿Te compraste una casa, viajaste o hiciste alguna inversión a largo plazo?
De hecho, la verdad es que volví el mismo lunes por la mañana a trabajar y continué haciendo eso mismo durante ocho meses. Después nos trasladamos a una casa un poquito más grande, no mucho más, pero si un poco, y básicamente hay que pensar que yo tenía 27 años en esos momentos; había escuchado montones de historias de gente que había ganado mucho dinero de forma rápida, y en cambio se habían arruinado también muy rápidamente. Sólo pensé que yo no iba a ser uno más. Pensaba actuar con la cabeza fría y administrar bien el dinero.
Durante cuatro o cinco meses dejamos el dinero parado, ni lo tocamos. De hecho, eso fue lo que hicimos durante tanto tiempo como nos fue posible, hasta que tomamos la mejor decisión que consideramos para hacer algo realmente bueno con ese dinero.
PW: La verdad es que estoy impresionada con el hecho de que guardaras todo ese dinero. Dime, ¿viajaste para jugar más eventos en vivo? ¿Sentiste a partir de ese momento que te apetecía jugar eventos importantes?
Si, la verdad es que a partir de entonces viajé bastante, pero siempre lo hacía de la mano de mi sponsor. De hecho, a día de hoy sigue siendo así; eso es básicamente lo que voy jugando, lo que me pide mi sponsor. No suelo usar mi dinero para jugar, a menos que juegue cash, lógicamente. Y aún siendo así, los límites que puedo jugar no son altos: 2$-5$ y 5$-10$. Si que es cierto que he jugado en límites altos, como 50$-100$ incluso 100$-200$, pero me encuentro mucho más cómodo en 2$-5$, donde sé que suele haber 7 u 8 malos jugadores de los cuales voy a poder sacar provecho. En cambio, en niveles 25$-50$, la gente que se mueve, ya sabes, intentan buscarse la vida, no siendo ese un ambiente tan divertido, ya sabes...
PW: ¿Confiabas en el poker online cuando empezaste a jugar? Ya sabes, se escuchaban muchas cosas por aquellos entonces sobre amaños, trampas, etc.. ¿Tenías sospechas, o simplemente te pusiste a jugar, y ya está?
Ambas cosas. Me puse a jugar, sin más, pero sí admito que tenía cierta sospecha, motivo por el cual empecé a jugar sólo heads-up. No me gustaba jugar contra mucha gente. Me daba la sensación de que podían estar compinchados contra mí o algo así, por eso siempre intentaba jugar HU. Cuando una tercera persona se sentaba, yo me iba. En primer lugar porque me gustaba la acción, me gustaba jugar HU... Hoy en día me gusta el HU y el short-handed. Para mí, jugar mesa larga es bastante aburrido; ya sabes, no me gusta sentarme, y tener que estar foldeando manos todo el rato.
[…] Así que sí, era un poco escéptico sobre lo que estaba pasando en cada momento, pero por otro lado, disfrutaba muchísimo del hecho de poderme sentar en mi ordenador y jugar a poker sin tener necesidad de irme de casa.
PW: ¿Jugabas regularmente online antes del Black Friday?
Si, jugaba casi todos los días. De hecho, mi rutina cuando estaba en casa, era levantarme por la mañana, llevar a los niños al colegio, salir a correr un poco con mi mujer y después, me ponía a jugar sobre una hora, tal vez algo más, por la tarde, antes de ir a recoger a los niños. Entonces, tocaba darles el baño y llevarlos a la cama después de cenar. Una vez ellos ya estaban acostados, mi mujer y yo nos poníamos a ver la TV, momento que yo aprovechaba para abrir algún torneo. Especialmente me gustaba el Super Tuesday y el Wednesday One Quarter Million de los miércoles.
Siempre intentaba jugar esos torneos que se podían alargar toda la noche; mientras los demás dormían, yo aprovechaba para abrir también algunas mesas de PLO heads-up. Las noches de los martes y los miércoles eran mis grandes noches de poker. Después, también jugaba algunos de los torneos dominicales. Esa era mi rutina cuando estaba en casa. Obviamente, todo cambió cuando llegó el 15 de abril.
PW: ¿Jugabas únicamente en PokerStars cuando empezaste a jugar, o jugabas también en otras salas antes del Main Event, y a partir de ahí, te pasaste unicamente a PS?
Cuando empecé, estaba jugando en dos salas: PartyPoker y PokerStars, pero poco a poco me iba pasando cada vez más a PokerStars, simplemente porque me gustaba mucho más el software. En PartyPoker estaban los peores jugadores, pero PokerStars tenía suficientes jugadores malos; eso unido a que los torneos de PokerStars eran mucho mejores que los de Party, me convenció para pasarme por completo a la primera, porque a mí lo que me gustaba era jugar torneos.
De hecho, la verdad es que volví el mismo lunes por la mañana a trabajar y continué haciendo eso mismo durante ocho meses. Después nos trasladamos a una casa un poquito más grande, no mucho más, pero si un poco, y básicamente hay que pensar que yo tenía 27 años en esos momentos; había escuchado montones de historias de gente que había ganado mucho dinero de forma rápida, y en cambio se habían arruinado también muy rápidamente. Sólo pensé que yo no iba a ser uno más. Pensaba actuar con la cabeza fría y administrar bien el dinero.
Durante cuatro o cinco meses dejamos el dinero parado, ni lo tocamos. De hecho, eso fue lo que hicimos durante tanto tiempo como nos fue posible, hasta que tomamos la mejor decisión que consideramos para hacer algo realmente bueno con ese dinero.
PW: La verdad es que estoy impresionada con el hecho de que guardaras todo ese dinero. Dime, ¿viajaste para jugar más eventos en vivo? ¿Sentiste a partir de ese momento que te apetecía jugar eventos importantes?
Si, la verdad es que a partir de entonces viajé bastante, pero siempre lo hacía de la mano de mi sponsor. De hecho, a día de hoy sigue siendo así; eso es básicamente lo que voy jugando, lo que me pide mi sponsor. No suelo usar mi dinero para jugar, a menos que juegue cash, lógicamente. Y aún siendo así, los límites que puedo jugar no son altos: 2$-5$ y 5$-10$. Si que es cierto que he jugado en límites altos, como 50$-100$ incluso 100$-200$, pero me encuentro mucho más cómodo en 2$-5$, donde sé que suele haber 7 u 8 malos jugadores de los cuales voy a poder sacar provecho. En cambio, en niveles 25$-50$, la gente que se mueve, ya sabes, intentan buscarse la vida, no siendo ese un ambiente tan divertido, ya sabes...
PW: ¿Confiabas en el poker online cuando empezaste a jugar? Ya sabes, se escuchaban muchas cosas por aquellos entonces sobre amaños, trampas, etc.. ¿Tenías sospechas, o simplemente te pusiste a jugar, y ya está?
Ambas cosas. Me puse a jugar, sin más, pero sí admito que tenía cierta sospecha, motivo por el cual empecé a jugar sólo heads-up. No me gustaba jugar contra mucha gente. Me daba la sensación de que podían estar compinchados contra mí o algo así, por eso siempre intentaba jugar HU. Cuando una tercera persona se sentaba, yo me iba. En primer lugar porque me gustaba la acción, me gustaba jugar HU... Hoy en día me gusta el HU y el short-handed. Para mí, jugar mesa larga es bastante aburrido; ya sabes, no me gusta sentarme, y tener que estar foldeando manos todo el rato.
[…] Así que sí, era un poco escéptico sobre lo que estaba pasando en cada momento, pero por otro lado, disfrutaba muchísimo del hecho de poderme sentar en mi ordenador y jugar a poker sin tener necesidad de irme de casa.
PW: ¿Jugabas regularmente online antes del Black Friday?
Si, jugaba casi todos los días. De hecho, mi rutina cuando estaba en casa, era levantarme por la mañana, llevar a los niños al colegio, salir a correr un poco con mi mujer y después, me ponía a jugar sobre una hora, tal vez algo más, por la tarde, antes de ir a recoger a los niños. Entonces, tocaba darles el baño y llevarlos a la cama después de cenar. Una vez ellos ya estaban acostados, mi mujer y yo nos poníamos a ver la TV, momento que yo aprovechaba para abrir algún torneo. Especialmente me gustaba el Super Tuesday y el Wednesday One Quarter Million de los miércoles.
Siempre intentaba jugar esos torneos que se podían alargar toda la noche; mientras los demás dormían, yo aprovechaba para abrir también algunas mesas de PLO heads-up. Las noches de los martes y los miércoles eran mis grandes noches de poker. Después, también jugaba algunos de los torneos dominicales. Esa era mi rutina cuando estaba en casa. Obviamente, todo cambió cuando llegó el 15 de abril.
PW: ¿Jugabas únicamente en PokerStars cuando empezaste a jugar, o jugabas también en otras salas antes del Main Event, y a partir de ahí, te pasaste unicamente a PS?
Cuando empecé, estaba jugando en dos salas: PartyPoker y PokerStars, pero poco a poco me iba pasando cada vez más a PokerStars, simplemente porque me gustaba mucho más el software. En PartyPoker estaban los peores jugadores, pero PokerStars tenía suficientes jugadores malos; eso unido a que los torneos de PokerStars eran mucho mejores que los de Party, me convenció para pasarme por completo a la primera, porque a mí lo que me gustaba era jugar torneos.
PW: ¿Viajas para jugar todos los torneos de PokerStars, o seleccionas los que te apetece jugar?
La verdad es que mi situación es realmente afortunada, ya que no tengo porque viajar para jugar todos los eventos. Sólo yo elijo a dónde quiero ir. Intento buscar sitios donde nunca he estado, o selecciono los torneos que me hacen más ilusión jugar. Por otro lado, podría ir a todos, si eso fuera mi deseo.
La gente me pregunta cómo es que no juego todos y cada uno de los torneos que organiza mi patrocinador. Mi respuesta es muy sencilla: eso sería de locos. Tengo una familia, y tengo muchas otras cosas en mi vida que no son sólo poker. Es por eso que selecciono: Montecarlo siempre suele ser divertido, también me gusta ir a Londres... Ya ves, simplemente me gusta ir a sitios distintos que en otra situación no tendría ocasión de visitar.
La verdad es que mi situación es realmente afortunada, ya que no tengo porque viajar para jugar todos los eventos. Sólo yo elijo a dónde quiero ir. Intento buscar sitios donde nunca he estado, o selecciono los torneos que me hacen más ilusión jugar. Por otro lado, podría ir a todos, si eso fuera mi deseo.
La gente me pregunta cómo es que no juego todos y cada uno de los torneos que organiza mi patrocinador. Mi respuesta es muy sencilla: eso sería de locos. Tengo una familia, y tengo muchas otras cosas en mi vida que no son sólo poker. Es por eso que selecciono: Montecarlo siempre suele ser divertido, también me gusta ir a Londres... Ya ves, simplemente me gusta ir a sitios distintos que en otra situación no tendría ocasión de visitar.
PW: PokerStars se ha deshecho de algunos de sus jugadores del Team Pro como ya todos sabemos. No te voy a pedir que me des destalles de tus condiciones dentro del equipo, pero ¿sentiste en algún momento que podrías seguir los pasos de alguno de tus compañeros?
¡No! Siempre he sentido que seguiríamos juntos incluso después del 15 de abril. Siempre hemos tenido muy buena comunicación entre PokerStars y yo, por lo que siempre me he sentido muy cómodo y tranquilo trabajando con ellos. Nunca me he cuestionado si eso iba a seguir siendo así.
La única duda fue cuáles serían mis competencias una vez ya no se podía jugar en EE.UU. Lo estuvimos hablando, y ambas partes acordamos algo que nos iba bien a todos, que se basaba en lo que estoy haciendo ahora. Viajar de vez en cuando, pero sin tener que abandonar de forma “perpetua” los EE.UU, aunque si que es cierto que me esfuerzo en viajar un poco más de lo habitual.
PW: En la película de “All In: The Poker Movie”, mencionas que te sentaron en la mesa televisada junto a Johnny Chan y Howard Lederer, y obviamente te pusiste nervioso. Pero si te sentaran hoy en día con tres o cuatro profesionales, ¿te volverías a poner nervioso?
Claro que no... Ya sabes, cuando vas a un torneo, hoy en día todos los que hay son profesionales. Cuando juegas las World Series es una cosa, pero cuando te desplazas hasta Montecarlo, o a otros eventos de 5.000 y 10.000, no suelo jugar con gente necesariamente conocida.
Conoces a los profesionales, pero no a todo el mundo.
Compartir mesa con ellos para mí es algo motivador. Me gusta enfrentarme a ellos. Me sentía intimidado tiempo atrás, porque considero que me faltaban armas. No había tenido tiempo de aprender todo lo que ellos sabían entonces, pero hoy en día, me siento muy cómodo aunque esté sentado con jugadores como Jason Mercier, probablemente uno de los mejores del mundo.
¡No! Siempre he sentido que seguiríamos juntos incluso después del 15 de abril. Siempre hemos tenido muy buena comunicación entre PokerStars y yo, por lo que siempre me he sentido muy cómodo y tranquilo trabajando con ellos. Nunca me he cuestionado si eso iba a seguir siendo así.
La única duda fue cuáles serían mis competencias una vez ya no se podía jugar en EE.UU. Lo estuvimos hablando, y ambas partes acordamos algo que nos iba bien a todos, que se basaba en lo que estoy haciendo ahora. Viajar de vez en cuando, pero sin tener que abandonar de forma “perpetua” los EE.UU, aunque si que es cierto que me esfuerzo en viajar un poco más de lo habitual.
PW: En la película de “All In: The Poker Movie”, mencionas que te sentaron en la mesa televisada junto a Johnny Chan y Howard Lederer, y obviamente te pusiste nervioso. Pero si te sentaran hoy en día con tres o cuatro profesionales, ¿te volverías a poner nervioso?
Claro que no... Ya sabes, cuando vas a un torneo, hoy en día todos los que hay son profesionales. Cuando juegas las World Series es una cosa, pero cuando te desplazas hasta Montecarlo, o a otros eventos de 5.000 y 10.000, no suelo jugar con gente necesariamente conocida.
Conoces a los profesionales, pero no a todo el mundo.
Compartir mesa con ellos para mí es algo motivador. Me gusta enfrentarme a ellos. Me sentía intimidado tiempo atrás, porque considero que me faltaban armas. No había tenido tiempo de aprender todo lo que ellos sabían entonces, pero hoy en día, me siento muy cómodo aunque esté sentado con jugadores como Jason Mercier, probablemente uno de los mejores del mundo.
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