Poder encajar al poker en línea, las apuestas deportivas y los juegos online en general dentro de las leyes gubernamentales de un país es uno de los mayores retos que tiene la industria en la actualidad.
Desde hace algunos años, y sobre todo durante la pandemia de COVID-19, los gobiernos nacionales han puesto especial atención a cómo sus ciudadanos se involucran con las apuestas online. El juego responsable y la ludopatía son los principales factores que están dictaminando las nuevas leyes.
En cuanto al poker en línea se refiere, el problema ha sido doble: además de los puntos antes expuestos, la disciplina sigue siendo catalogada como un juego de azar y por ende, lo rigen las mismas regulaciones. Hasta ahora, siempre había sido una lucha unidireccional, con los poderes gubernamentales imponiendo sanciones al sector, pero ahora pareciera que esto está cambiando.
Recientemente se dio a conocer la noticia de que 33 operadores de apuestas deportivas y juegos de azar, en una localidad de Alemania , han emprendido una demanda colectiva en contra del alto nivel de restricciones que se han puesto al mercado para poder realizar su actividad económica.
«Tales restricciones por las que estamos peleando podrían hacer que los jugadores busquen sitios peligrosos en el extranjero que podrían estar operando ilegalmente”, comentó Mathias Dahms , portavoz de la Asociación Alemana de Apuestas.
Otro de los argumentos de la demanda se basa en la caída de las ganancias para esta industria. De 9.8 millones de dólares pasaron a 8.2 millones de dólares tras la puesta en marcha de la normativa que, entre otros asuntos, limita a 1.000 euros mensuales lo que los usuarios pueden usar en el total de las plataformas.
Comentarios
Publicar un comentario